Foto de R.M. del Valle Inclán
Biografía de R.M. del Valle Inclán
Ramón Valle y Peña nace el 28 de Octubre
de 1866 en Villanueva de Arosa (Pontevedra), procedente de familia de noble
abolengo, aunque ya no gozaba de buena situación económica. Entre sus
antepasados ilustres se encontraba Francisco de Valle Inclán de quien Valle
toma su nombre artístico.
Valle-Inclán inicia su formación bajo la
tutela de su padre y el catedrático Jesús Muruáis ejerció sobre él una gran
influencia en los primeros años. Posteriormente se matricula en la facultad de
leyes de Santiago aunque más que a los estudios, se dedica fundamental a
participar en los círculos culturales gallegos. A la muerte de su padre, se
traslada a Madrid y allí continúa su incipiente labor literaria.
En 1892 marcha a Méjico. Más tarde dará
como motivo de este viaje en una fingida autobiografía publicada la necesidad
de huida ante un desengaño amoroso y justifica la elección del país porque
"México se escribe con equis".
En Veracruz mantendrá relaciones con
periodistas de los diarios locales con los que colabora. Pronto marcha a la
capital mejicana, donde adopta el nombre de Valle Inclán y entra en contacto
con el Modernismo. Tras una temporada en Cuba vuelve a Galicia en 1893 y
permanece algún tiempo ocupado en lecturas y tertulias. Adopta ya la indumentaria
más o menos estrafalaria de los jóvenes escritores franceses y en 1895 publica
su primer libro, Femeninas, prologado por Manuel Murguía.
En 1896 Valle se instala en Madrid. Son
los años del Desastre pero también un tiempo fecundo en talentos literarios en
el que se practica e idealiza la vida bohemia marcada por tertulias,
dificultades económicas. Entre los contertulios de nuestro escritor destaca lo
más representativo de la intelectualidad de la época: Benavente, los Baroja,
Azorín. Se convierte en un personaje famoso y la fama de sus anécdotas se
extiende por los ambientes culturales madrileños.
En 1902 la publicación de Sonata de Otoño le
hace conocer el éxito y en 1907 se casa con la actriz Jo sefina Blanco a la que
acompañará en numerosos viajes por diversos países como Argentina, Chile o
Uruguay. En 1912 inicia la publicación de su Opera omnia.
Por otra parte, trabaja como corresponsal
de guerra para distintos periódicos y se crea para él la cátedra de estética de
la Escuela de Bellas Artes a la que renuncia por no saber aclimatarse a la vida
académica. Los años siguientes están marcados por la alternancia entre períodos
de reconocimiento y cargos públicos con otros de penurias económicas. Se
divorcia de su esposa y ve rechazada definitivamente su candidatura a la
Academia.
Muere en Santiago el 4 de enero de 1936.
Perfil
humano
La personalidad de Valle Inclán es sumamente
compleja: soñador, aficionado a los cuentos y leyendas galaicas, a las gestas
heroicas y a los ideales utópicos, enemigo de toda vulgaridad y oportunismo.
Se sentía atraído por lo irracional y
esotérico. En sus obras nos ha dejado abundantes muestras de su interés y
fascinación por los fenómenos sobrenaturales y la cábala. En muchos aspectos es
un típico escritor de fin de siglo pero siempre original.
Con su curioso ceceo llevaba la voz
cantante en las tertulias y le gustaba mostrarse independiente y altivo como un
"enfant terrible" que se distinguía además por su vestimenta. Para
Gómez de la Serna "era la mejor máscara a pie que cruzaba la calle de
Alcalá" y el dictador Primo de Rivera lo calificó de "eximio escritor
y extravagante ciudadano". En conjunto, como han destacado muchos de sus
contemporáneos, llevaba "una vida teatral que se desarrollaba detrás de
una máscara".
Antonio Machado, con la bondad que le
caracteriza, nos da una visión de Valle Inclán a través de Juan de Mairena que
lo conoció en 1895 y fue uno de los tres compradores de Femeninas: "La
verdad es - decía Mairena a sus amigos- que este hombre parece muy capaz de
haber realizado todas las proezas que se atribuye.. si no fue nombrado - como
él nos cuenta- Mayor honorario del Ejército de Tierra Caliente, culpa habrá
sido de los mejicanos. se salvará no por la espada sino por la pluma, Valle
Inclán será el santo de nuestras letras."